No soy bueno en nada…


Hoy quiero hablarles sobre que hay que hacer de todo pero no ser bueno en nada o al revés. Desde que era joven (ya me sentí viejo, cumplo 38 años el 8 junio), esto ha sido algo que me ha marcado y sobre lo cual he tenido que tomar decisiones. Es imposible convertirse en el mejor o uno de los mejores en algo si no nos dedicamos casi exclusivamente y con gran dedicación a ello. ¿Qué hubiera pasado si Cristiano Ronaldo hubiera decidido jugar otro deporte al mismo tiempo que fútbol? ¿Sería la estrella que es hoy? No lo creo. Hay muchos ejemplos similares. No solo se trata de tener talento innato, sino de llevarlo al máximo.

Nunca me he visto a mí mismo como alguien destinado a una sola cosa, no solo porque soy realista y sé que no poseo ningún talento excepcional, sino porque me gusta hacer muchas cosas a la vez. En algún momento de mi vida, me dediqué al tenis al cien por cien, llegando a ser subcampeón de Costa Rica, pero decidí retirarme porque me aburrí (tampoco es que era taaan bueno la verdad). Luego, decidí probar suerte como piloto de automovilismo y, aunque puse mucho esfuerzo y no me aburrí, me di cuenta de que no tenía el talento necesario para dedicar mi vida a eso. Así ha sido con muchas otras cosas, nunca quise destacar en una sola cosa, ni en lo personal, ni deportivo, ni profesional.. Quería aprender un poco de todo, y ese ha sido el camino que he seguido hasta ahora.

Hoy me considero alguien que puede hacer de todo, pero que nunca seré una superestrella o uno de los mejores en nada, y eso tiene sus aspectos positivos y negativos. Saber de todo me permite no poner límites en la vida y tener una visión más amplia de las cosas, lo que me permite tener varios grupos con quienes compartir y establecer nuevos vínculos, especialmente en el ámbito deportivo. Sin embargo, también tiene sus partes negativas, ya que, para quienes me conocen, saben que soy muy competitivo y no me gusta perder. Esta fórmula que he adoptado me ha traído muchas derrotas y frustraciones.

Hoy constantemente me rio de mi mismo porque no tengo foco, a nivel profesional estoy involucrado en X cantidad de iniciativas y todos los meses invento una nueva. En mi lado deportivo, juego tenis y pádel (una no ayuda mucho a la otra), ando en bici, corro maratones, pesco, y muchas cosas más. Preguntenme si he ganado o me considero el mejor de mi grupo en alguna? No, y si bien a veces me trae frustraciones hago el balance y decido seguir haciendo de todo un poco aunque no logre ganar en ninguna. Algo que sí he decidido es ponerme alguna meta y por ese tiempo enfocarme un poco más en ese deporte y bueno, ya veremos si me funciona de algo.

En fin, este fin de semana volví a competir en automovilismo después de mucho tiempo sin hacerlo. Estaba muy emocionado, pero sabía que no sería fácil, ya que competía en una categoría con más de 31 pilotos, todos ellos jóvenes y algunos incluso profesionales. No conocía el coche ni la pista, pero la motivación de dejar a Costa Rica en lo más alto estaba presente y quería hacer un buen papel.

Dedique algo de tiempo a prepararme: probé un coche similar en Costa Rica, conduje karts y conocí la pista a través de un videojuego (esto ayuda mucho). Además, le pedí a un piloto profesional costarricense que conocía la pista que me acompañara durante un par de días de prácticas para ayudarme con la configuración y los datos para mejorar. Llegó la primera práctica, Danny Formal se subió al coche y rápidamente marcó el segundo mejor tiempo. Luego me subí yo y me fue terrible, fui segundo pero a casi 8 segundos del líder (en el mundo del automovilismo, eso es una eternidad, es decir, fue muy malo).

Analizamos vídeos y datos (aquí les dejo un video) y pudimos ver que perdía tiempo en las curvas rápidas (por miedo 🤣) y en las frenadas. Salí a la pista con el objetivo de entrar en el top 20, lo cual logré, y a partir de ahí comenzamos a mejorar. Aun así, seguía fuera del top 10, que siempre había sido mi objetivo, y para empeorar las cosas, nos impusieron una penalización y tuvimos que salir en última posición. Se van a reír pero esta penalización en parte hizo que disfrutara más la carrera, digo, salia de último, que peor podía pasar? Logré llegar hasta el puesto 17 y fue una de las competencias que más he disfrutado, de atrás para adelante. El fin de semana no terminaba ahí, ya que había una segunda carrera en la que mi objetivo siempre fue estar entre los diez primeros. Tuve una primera parte de la carrera increíble, incluso llegué a estar en la octava posición y cuando estaba a punto de adelantar al séptimo, las cosas comenzaron a complicarse. Varios coches me pasaron y me enredé en un grupo de competidores que venían detrás, perdiendo de vista al grupo de delante. El resto de la carrera la pasé peleando por la novena posición, pero lamentablemente no logré llegar más allá del puesto 11. Es importante siempre dar merito a quien lo merece, y ese puesto 11 no hubiera sido posible sin todo el excelente equipo que me acompañó el finde: Bernardo, Danny, Eduardo, Manfred, Daniel y Monica.

video preview

Esa fue la historia del fin de semana. Nos divertimos, por supuesto. ¿Se logró el objetivo? Depende de cuál sea. A nivel competitivo, no lo logramos. A nivel personal, sí. Entonces, ¿cuál es más importante? También depende 🤣. Si estuviera en una edad temprana y quisiera hacer una carrera como piloto, definitivamente habría sido un fin de semana de fracaso, pero esa no es mi realidad actual. Mi objetivo es disfrutar de la carrera, ser competitivo y, además, disfrutar con las personas que me apoyan.

Y para ustedes, ¿están logrando sus objetivos? ¿Saben realmente cuáles son? Porque si no los conocen, ahí es donde debemos empezar.

¡Pura vida!"

¡Hola capitanes y capitanas!

Soy Amadeo, un emprendedor de la vida, impulsado por lo social, amante de la adrenalina y papá de dos hijos. Me encantan los negocios, sobre todo los emprendimientos, pero lo que más me mueve es formar más capitanes, que como yo, puedan tener las oportunidades para ser feliz, soñar y dejar una huella.

Read more from ¡Hola capitanes y capitanas!

La historia detrás de 8Homes Nosara Siempre he creído que los grandes proyectos nacen cuando uno se atreve a desafiar los límites y se niega a aceptar los “no se puede”. 8Homes no nació con una visión clara ni con un propósito firme pero si con la mejor actitud para lograr algo bonito y con impacto. Con el tiempo fue tomando forma, agarrando fuerza… hasta convertirse en algo mucho más grande y con mucho más sentido. Hace cuatro años empecé a soñar con un startup de short-term rentals. Aunque...

El calor de este finde no vino del clima, sino de la cabeza... de esos momentos en que las emociones se suben a mil. Siempre he sido una persona bastante competitiva, de las que no les gusta perder, que empuja fuerte, y además, bastante “fosforín”. Pero uno va creciendo, va cambiando. Y aunque sigo siendo apasionado por competir y por dar lo mejor de mí, siento que hoy mi nivel de control ha mejorado Este año decidí volver a correr karts. Hacía más de 20 años que no me montaba en un kart....

Siempre estoy cuestionando mi rol en el mundo: qué quiero hacer y qué debo hacer. No es una crisis existencial, sino una búsqueda constante de cómo sacarle el máximo provecho a la vida. Para bien o para mal, me cuesta estar conforme con lo logrado. Siempre quiero más. Charlie Munger decía que “The secret to happiness is to lower your expectations”, pero claramente, ese no es mi caso. Para mí, ese impulso de buscar más es mi motor. Claro, a veces tengo que frenarlo un poco, porque, por ir tan...