La historia detrás de 8Homes Nosara Siempre he creído que los grandes proyectos nacen cuando uno se atreve a desafiar los límites y se niega a aceptar los “no se puede”. 8Homes no nació con una visión clara ni con un propósito firme pero si con la mejor actitud para lograr algo bonito y con impacto. Con el tiempo fue tomando forma, agarrando fuerza… hasta convertirse en algo mucho más grande y con mucho más sentido. Hace cuatro años empecé a soñar con un startup de short-term rentals. Aunque mi juventud la viví en Playa Hermosa, Guanacaste, la vida me llevó a enfocarme en Nosara. Una playa única en Costa Rica, con vibra especial: surf, familia, gastronomía, comunidad… Lo tenía todo para ser un lugar ganador. Comencé la búsqueda de terrenos. Claro, no era el mejor momento —post pandemia, precios por las nubes— y aunque estuve a punto de lanzarme con algunos, por dicha no se dieron. Seguí esperando hasta que apareció un terreno bien ubicado, pero privado, con una buena energía y a un precio justo. Después de varias vueltas y negociaciones, cerramos trato. Le di viaje. Lo curioso es que, durante ese proceso, el concepto fue evolucionando. Pasó de ser una “startup” a un proyecto con alma. Hoy, 8Homes es 100% sin fines de lucro. No se trata solo de una casa bonita en un lugar increíble. Es un espacio con intención: para reconectar, descansar con conciencia y generar impacto. Cada estadía en 8Homes apoya directamente proyectos sociales y ambientales en Costa Rica. Cada dólar cuenta. Cada huésped es parte del cambio. Porque creemos que los lugares con propósito pueden transformar vidas y comunidades. Desde el inicio, me propuse tener la casa lista para Semana Santa. No porque debía estar terminada al 100%, sino porque quería compartir esos primeros días ahí con mi familia, hacer el “punch list” final, y asegurarme de que el espacio fuera habitable, funcional y seguro. En el papel, parecía poco realista. El tiempo era justo. Las condiciones no siempre jugaron a favor. Pero había algo más fuerte que la lógica: la determinación de lograrlo o a quienes me conocen, “juponada”. Lo que siguió fue una carrera contra el reloj. Tuvimos reuniones diarias, ajustes constantes y la capacidad para encontrar soluciones donde parecía que no las había. En los días previos a Semana Santa, decidí ir personalmente a Nosara y sumarme al trabajo. No como supervisor, sino como uno más. Fueron horas intensas en las que ayudé en lo que hiciera falta: mover muebles, limpiar, montar detalles. Se trataba de estar ahí, de acompañar a un equipo que lo había dado todo. Gente que trabajó bajo el sol, la lluvia, en condiciones difíciles. Algunos estuvieron a punto de ver sus zonas de descanso inundadas… y aun así, ahí estaban, once meses después, con la mejor actitud, cerrando un proyecto que probablemente nunca volverán a ver. Pero bueno, así es la vida. Ya habrá otro momento para filosofar sobre eso. “Así encontramos la casa el jueves, apenas dos días antes de estrenarla.” 8Homes se construyó con ocho pilares como base: lujo, bienestar, seguridad, familia, naturaleza, comunidad, sostenibilidad y propósito. Es un proyecto que busca demostrar que el confort y la contribución social pueden ir de la mano. Que es posible crear espacios que no solo se disfrutan, sino que también transforman. Desde junio, 8Homes Nosara abre sus puertas para quienes quieran disfrutar de este lugar y, al mismo tiempo, dejar una huella positiva en la comunidad. Si les interesa conocer más, pueden escribir a nosara@ochohomes.com y mencionar el código "capitán" para un precio especial. Esta es apenas la primera casa. El comienzo de algo mucho más grande. Gracias a todos los que creyeron, trabajaron y lo hicieron realidad. |
Soy Amadeo, un emprendedor de la vida, impulsado por lo social, amante de la adrenalina y papá de dos hijos. Me encantan los negocios, sobre todo los emprendimientos, pero lo que más me mueve es formar más capitanes, que como yo, puedan tener las oportunidades para ser feliz, soñar y dejar una huella.
El calor de este finde no vino del clima, sino de la cabeza... de esos momentos en que las emociones se suben a mil. Siempre he sido una persona bastante competitiva, de las que no les gusta perder, que empuja fuerte, y además, bastante “fosforín”. Pero uno va creciendo, va cambiando. Y aunque sigo siendo apasionado por competir y por dar lo mejor de mí, siento que hoy mi nivel de control ha mejorado Este año decidí volver a correr karts. Hacía más de 20 años que no me montaba en un kart....
Siempre estoy cuestionando mi rol en el mundo: qué quiero hacer y qué debo hacer. No es una crisis existencial, sino una búsqueda constante de cómo sacarle el máximo provecho a la vida. Para bien o para mal, me cuesta estar conforme con lo logrado. Siempre quiero más. Charlie Munger decía que “The secret to happiness is to lower your expectations”, pero claramente, ese no es mi caso. Para mí, ese impulso de buscar más es mi motor. Claro, a veces tengo que frenarlo un poco, porque, por ir tan...
Hasta hace unos meses, pensaba que la tecnología era un gran complemento para nuestra mente. Hoy, después de experimentar más con la inteligencia artificial, creo que, más bien, puede ser un enemigo. Podemos preguntarnos: ¿Acaso la calculadora nos hizo tontos? No, pero estamos en otro juego. La IA ya nos supera y, al hacerse más fácil de usar, dejará poco espacio para que ejercitemos nuestro cerebro. Por ejemplo, ahora escribo este boletín porque voy aburrido en el avión sin internet, pero la...