¡Feliz año! Sí, sé que es un poco tarde, pero como dicen, mejor tarde que nunca. Tenía este correo listo para enviar, pero me arrepentí. Aunque era bastante positivo, compartiendo logros, mi visión, mis objetivos deportivos, planes de viaje y más, al leerlo varias veces me di cuenta de que sonaba un poco como esas historias de Disney donde todo es perfecto, sin reflejar las realidades menos positivas.
Me gusta mantener una actitud positiva, pero también creo que es importante abordar las cosas que no están bien para poder mejorarlas. El año 2023 fue excelente para mí, y siempre estoy buscando maneras de hacer que las cosas sean aún mejores. Aunque debemos apreciar lo que tenemos, nunca debemos darlo por sentado ni dejar de creer que siempre hay espacio para mejorar. Esto es esencial tanto a nivel personal como empresarial, ya que dejar de sonar y desafiarnos a nosotros mismos puede conducir al fracaso.
Aunque mi año fue positivo, reconozco que no fue así para todos. A nivel mundial, enfrentamos desafíos como guerras, ataques, odio, récord de muertes en el país, cierre de muchas startups, temperaturas récord debido al calentamiento global y más. Si no abordamos estos problemas de frente, todos nuestros logros personales a largo plazo podrían carecer de significado.
Es crucial reflexionar no solo sobre lo positivo, sino también sobre lo que no salió tan bien. "No logramos invertir en la cantidad de startups que nos propusimos, no pude llevar a cabo un programa de fellows, el pago por resultados resultó más caro de lo proyectado, algunas startups tuvieron down rounds significativos, y no ganamos las 3 horas de Costa Rica, entre otros." Aunque no son tragedias, es importante reconocer estos desafíos para aprender de ellos.
¿Ya han establecido sus metas para este año? ¿Qué quieren lograr y qué los motiva? Este ejercicio no es fácil, pero es necesario. Antes de definir metas pequeñas, debemos tomarnos el tiempo para reflexionar sobre lo que realmente queremos ser. Personalmente, mi propósito es "Potenciar capitanes", y mi meta es ser el actor más relevante en venture y movilidad en Centroamérica, brindando oportunidades a los jóvenes para equilibrar la cancha.
En el boletín no enviado, compartí muchas metas y hasta una carta que me escribí a mí mismo para abrir en 10 años. Aunque no la comparto, les dejo el enlace por si quieren probar este bonito ejercicio de proyección: https://www.futureme.org/. Lo más destacado de mi carta fue la idea de no arrepentirme de nada en la vida.
Una vez que definimos nuestros propósitos, todo fluye mejor hacia nuestras metas. Personalmente, he dividido mis metas en ocho áreas (ya saben por qué): deportiva, profesional, placer, social, personal, familiar, experiencial y otros. Establezco un objetivo principal en cada área y luego otros objetivos que me ayudarán a alcanzarlos. Hay muchas formas de hacer esto, pero quería compartirles una guía que ha funcionado para mí: reflexionen, definan su misión de vida, vean lo positivo y enfrenten los fracasos, dividan en áreas importantes y establezcan una meta para cada una.
¡Pura vida!
Les comparto un podcast en el que fui invitado a principios de año, donde hablo sobre mi pasión por los autos, la familia y más:
Soy Amadeo, un emprendedor de la vida, impulsado por lo social, amante de la adrenalina y papá de dos hijos. Me encantan los negocios, sobre todo los emprendimientos, pero lo que más me mueve es formar más capitanes, que como yo, puedan tener las oportunidades para ser feliz, soñar y dejar una huella.
La historia detrás de 8Homes Nosara Siempre he creído que los grandes proyectos nacen cuando uno se atreve a desafiar los límites y se niega a aceptar los “no se puede”. 8Homes no nació con una visión clara ni con un propósito firme pero si con la mejor actitud para lograr algo bonito y con impacto. Con el tiempo fue tomando forma, agarrando fuerza… hasta convertirse en algo mucho más grande y con mucho más sentido. Hace cuatro años empecé a soñar con un startup de short-term rentals. Aunque...
El calor de este finde no vino del clima, sino de la cabeza... de esos momentos en que las emociones se suben a mil. Siempre he sido una persona bastante competitiva, de las que no les gusta perder, que empuja fuerte, y además, bastante “fosforín”. Pero uno va creciendo, va cambiando. Y aunque sigo siendo apasionado por competir y por dar lo mejor de mí, siento que hoy mi nivel de control ha mejorado Este año decidí volver a correr karts. Hacía más de 20 años que no me montaba en un kart....
Siempre estoy cuestionando mi rol en el mundo: qué quiero hacer y qué debo hacer. No es una crisis existencial, sino una búsqueda constante de cómo sacarle el máximo provecho a la vida. Para bien o para mal, me cuesta estar conforme con lo logrado. Siempre quiero más. Charlie Munger decía que “The secret to happiness is to lower your expectations”, pero claramente, ese no es mi caso. Para mí, ese impulso de buscar más es mi motor. Claro, a veces tengo que frenarlo un poco, porque, por ir tan...